La visión absurda de una gris quimera,
el rincón ingrato de un lugar de espera.
Desarmo las trampas que pone el destino,
abro mi equipaje al nuevo camino.
Resisto las tramas... desenredo el alma,
conquisto mis sueños buscando mi calma.
Guardo en mis pupilas la imagen que anhelo,
soy mujer más plena tras el desacierto.
Caprichos del tiempo... corazón a prueba,
me voy tras los ojos que esperan afuera.
Concibo en mi pecho un pimpollo alado,
Un rostro con nombre se queda a mi lado.
Mis manos se abren como rosa nueva,
abrazo verdades en la nueva entrega.
Un rincón de luz se arraiga a mis brazos,
nobles de ternura bajo un cielo claro.
Y es la pausa a afable sobre la desidia,
y es caricia eterna como la llovizna.
Es pasión que llega como suave brisa...
es canción del aire que fluye atrevida.
Norma Marchetti
3/12/11
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