Al caer la tarde
abriré mi pecho,
cincelo nostalgias...
esculpo mi sueño.
Tejeré un poema...
lo pondré a tu lado,
dejaré un pimpollo
dentro de tus manos.
Desgarro la noche
y salgo del juego,
ya no habrá prisiones
de llanto y misterio.
Me llevo mi tiempo
donde yo decida,
no habrá sufrimiento...
no estaré escondida.
Perfumo mi pecho
con azahares blancos,
la paz añorada
me abre sus brazos.
Norma Marchetti
23/3/12
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.