Reivindico el manso pulso acompasado,
el silencio postergado del bullicio,
la canción de aquel inicio improvisado,
la mirada solitaria del inicio.
La promesa de no bajar los brazos,
las lágrimas que botan sin malicia,
las distancias que me duelen en los labios,
las noches de ausencias padecidas.
La fuerza del amor incorruptible,
la esquina que doble... y el desarraigo,
el tiempo de ese marco inverosímil...
la firme decisión sobre el cansancio.
El sol que me pinte en la tormenta,
la mano que me asía sin el tacto,
las letras que clarearon mis reyertas,
la vuelta a mi verdad... lo esperado.
Norma Marchetti
2/7/12
Norma, quiero felicitarte desde el fondo de mi corazón.Todo lo que he leido , poesias y textos, son belísmos.Lo guardo en mis favoritos y seguiré leyendote.Un abrazo de quien, como es mi caso, busca en las artes plásticas otra forma de expresion (o quizá la misma, es expresar sentimientos, emociones, lo visto y lo sentido, nuestro mundo interior) gracias!!!
ResponderEliminarSilvia Martincich