traductor

martes, 1 de marzo de 2011

Como te digo...

Como te digo... si parezco desquiciada,
es el dolor de imaginar no ser amada.
Como te digo que no grito... yo no quiero,
solo me aterra esta penumbra que no entiendo.

Como te digo que no pido nada extraño,
solo quiero que no hables con mis manos.
Como te digo que analizo los detalles
del silencio que dejas sin perturbarte.

Como te digo que soy frágil y tranquila,
solo me asusto en la desdicha que me abriga.
Como te digo que esto no es tan complicado,
que yo quiero ese café tan postergado.

Como te digo que no quiero alguien perfecto,
lo ideal es lo sencillo... lo honesto.
Como te digo que no creo ser lejana...
si siempre estoy tan cerca que te cansa.

Como te digo que no entiendo que te pasa,
que mis manos que se estiran no te alcanzan.
Como te digo que yo espero y que destejo...
de Penélope mis noches... tu regreso.

Me darías dos segundos?...

Si por cada tontería yo ganase una indulgencia...
no dudes, estoy salvada... tendría la vida eterna.
Si por cada necedad una estrella se encendiera...
no dudes, ya no habría noche... cuidate de la ceguera.

Si por cada impaciencia cayera una gota de agua...
más grande este diluvio que aquel que requirió un arca.
Si por cada egoísmo se me otorgara una rima...
de las poetizas sería la más grande... a la cima!.

Si por cada yerro un rosa se posara aquí en mi mano...
otro Aconcagua hacia este... y yo estaría debajo.
Si por cada irreverencia, se deslizara un suspiro...
se volaría el Sahara hasta encontrar su destino.

Si por cada vez que dudo, alguien amase en el mundo...
dudaría hasta del sí que te dije hace un segundo.
Pero esto no sucede... gracias a Dios que es muy justo...
y si juro que te creo... me darías dos segundos?...